martes, 13 de julio de 2010

Mi amor, ya llegué...

En Batman Returns, de Tim Burton, Selina Kyle (una secretaria efectiva más apocada, una mujer invisible) llega a su apartamento, prende la luz y saluda con un optimista "Mi amor, ya llegué" para continuar luego de un brevísimo silencio: "Lo olvidé, no soy casada".

Algo en esa escena siempre me conmovía, con un dolor punzante. Ahora lo comprendo bien.

Acabo de llegar. Acabo de saludar, en un automatismo feliz, al aire frío de mi apartamento.

Lo olvidé. Ya no soy casado.

lunes, 12 de julio de 2010

Por qué bebo (argumentos de Poe)



El poeta desolado contesta, vencido a las demandas inacabables de sus interlocutores. Sus argumentos son breves, pero contundentes como su tragedia.

Me preguntas por qué bebo.

Sé bien que los motivos de mi postración generan curiosidad, teniendo en cuenta mi inteligencia, mi talento y mi reconocimiento... pero todo eso nada puede con este dolor profundo y helado que me araña con desesperación, este dolor viejo y triste que me arruya al son de mis poemas marchitos.

¿Bastará con decir que soy un viudo? ¿que a pesar de su ausencia y de su pérdida irremediable aún la amo? ¿que la sigo esperando cada día al atardecer, que la presiento en la brisa de la madrugada?

Dime, compañero, ¿cómo no perderme en la bebida? ¿quién querría llegar consciente al horror de buscarla entre las sábanas y no encontrarla?

Y no me conformo con los consuelos de mierda, esas esperanzas ridículas de los creyentes: un paraíso de angelitos regordetes, una transmutación en hadas etéreas, una reencarnación en un futuro lejano. ¡Para qué quiero eso, cuando no la tengo aquí, a mi lado!

¿Cómo reconstruírla a partir de recuerdos e ilusiones?

Me preguntas por qué bebo.

Tal vez deberías preguntarle al fantasma de mirada triste y labios dulces que me sigue a todas partes, esforzándose por abrazarme.

[Ilustración de Abigail Larson (también conocida como MirrorCradle)]